Descubriendo HUBiKU, Cenote Sagrado Maya

La península de Yucatán es una basta plataforma que se elevó de sur a norte hace unos 200 millones de años; dado que está formada por materiales que son relativamente fáciles de disolver  (compuesto de calcio), los procesos geológicos, meteorológicos e hídricos esculpieron poco a poco a manera de queso gruyer la corteza resultando en una gran densidad de dolinas, ts´ ono ´ot, o los llamados actualmente cenotes mayas.

La densidad de cenotes va de más a menos en los estados de Yucatán, Quintana Roo y Campeche, que conforman la península de Yucatán. A grosso modo, se dice que hay más de 7 mil cenotes distribuidos en estos estados, en Yucatán se han registrado alrededor de 2600, 600 en Quintana Roo y menos de un ciento en Campeche.

Estas cavidades cubiertas de agua o en términos geológicos, lagos de disolución, varían de forma de acuerdo a la etapa de su proceso kárstico en que se encuentran, su ornamentación la definen los espeleotemas (a saber, estalactitas, estalagmitas, columnas, etc.) que la van conformando. Su formación tiene dos vías, una externa y una interna. Su formación externa la configuran los procesos de disolución que se van dando,  ya sea de forma física por mera caída de la lluvia, o bien, al combinarse el agua de lluvia con el bióxido de carbono o materia orgánica, se acidifica formando acido carbónico o sulfhídrico, los cuales van perforando la corteza desde arriba. Su forma interna se da por la disolución causada por corrientes de agua que de forma física poco a poco disuelven la roca, o por la variación del nivel del agua dulce y agua salada (haloclinas), siendo ésta última lo que constituyen el más grande disolvente.

A mitad de camino entre la perla de occidente (Valladolid) y el jaguar negro (Ek-Balam) se encuentra el poblado de Temozón, que se caracteriza por su tradición culinaria en la preparación de carnes ahumadas y por sus creaciones en madera, y perteneciendo a este municipio se encuentra el Cenote de Hubiku.

Hubiku en lengua Maya significa “el gran señor” o “nido de iguanas”, está localizado en las coordenadas 20 49´ 79´´N, 88 10´21´´W, es un cenote subterráneo con una entrada u ojo en el techo. Su temperatura promedio de 20 C, tiene una caída del suelo al espejo de agua de 20 metros que se descienden por medio 115 escalones. 

Hubiku, es un cenote geológicamente joven cuya bóveda se colapsó cuando las raíces de un gran árbol la penetraron. La profundidad del agua es de 27 mts. y su forma es casi circular con un diámetro aproximado de 50 mts. A medio día un haz de luz desciende por el ojo de la bóveda hacia las cristalinas aguas de esta gran caverna sumergida y crea un gran espectáculo que no te los puedes perder.

El parque de Hubiku, en donde se encuentra el cenote del mismo nombre, cuenta con espléndidas instalaciones:

  • Recreación de una aldea maya tradicional, la cual tiene indicativos ilustrando como vivían los mayas en antaño.
  • Zona de hamacas para descansar.
  • Cenote semi-abierto cuya bóveda tiene 50 mts. de diámetro y cuenta con renta de chalecos, casilleros y toallas.
  • Museo del Tequila DON TADEO, donde aprenderás todo sobre esta famosa bebida nacional y su preparación.
  • 2 Restaurantes, uno para 160 y otro para 650 personas donde se ofrece una rica gastronomía en buffet internacional y baile de jarana todos los días.
  • Tienda de artesanías.
  • Baños, regaderas y vestidores.

 

       Los invitamos a sumergirse y disfrutar del cenote Hubiku, donde la naturaleza nos muestra su máxima belleza.